"Lo importante no son los años de vida sino la vida de los años".

"Que no os confundan políticos, banqueros, terroristas y homicidas; el bien es mayoría pero no se nota porque es silencioso.
Una bomba hace más ruido que una caricia, pero por cada bomba que destruye hay millones de caricias que alimentan la vida".

Al mejor padre del Mundo

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jueves, 27 de julio de 2017

LOS CESTOS (El boliche de Paco)

La Granja de San Ildefonso es un pueblito español perteneciente a la provincia de Segovia que durante mucho tiempo ha sido el lugar de residencia veraniega de la Corte Real Española. Está a 11 km de Segovia capital, al pie de las montañas de Guadarrama, que separan la provincia de Segovia de la de Madrid. La gran cantidad de monumentos como el Palacio Real, sus jardines con sus fuentes, así como la Real Fábrica de Cristales, así como el Parador Nacional, sito en la Casa de Infantes, hacen de esta localidad, un hervidero de turismo. Pues bien, en este lugar y no en otro, mi buen amigo Paco Bergareche decidió, ya hace muchos años, tirarse a la aventura hostelera, abriendo un bar que a la postre sería el lugar de encuentro de todos los grandes aficionados al folklore que visitaban España o que vivían en ella. Podríamos decir que LOS CESTOS fue en España lo que BALDERRAMA en Argentina.



EL "BOLICHE" LOS CESTOS "Todo empezó, nos cuenta Paco Bergareche, propietario del "boliche" y fundador de Los Granjeños (conjunto español de folklore argentino), como cualquier negocio de hostelería, pero debido a mi gran afición por el folklore, aproveché el lugar para poder cantar con Los Granjeños y ser escuchados por el público que por allí pasaba. No sé cómo, la bola se fue haciendo más grande y el boca a boca otra vez funcionó. Ten en cuenta que el Palacio de La Granja atrae a muchos turistas y entre ellos muchos argentinos.



En primer lugar invitamos a amigos folkloristas a cantar, grabamos un CD con Patricio Quirno Costa (Los Peregrinos) y este a su vuelta, habló de Los Cestos y del buen ambiente que teníamos. Por otro lado un día apareció el que era entonces director de Aerolíneas Argentinas, Juan Carlos Di Michele, gran aficionado al folklore, que no solo nos financió nuestro 2º CD, sino que además nos sacó en la revista Ronda Argentina, que fue leída por todo argentino que volaba en la compañía, promocionando enormemente el nombre de Los Cestos.



Gracias a todo ello, pudimos escuchar en vivo a lo mejor del folklore: Los Chalchaleros, Los Fronterizos, Los Cantores de Quilla Huasi, Carlos Carabajal, Ignacio Anzoátegui, César Isella, Dúo Coplanacu, Patricio Quirno Costa (de Los Peregrinos), Leopoldo van Cauwlaert (de Los 4 Hnos. Salteños), Dúo Socavón, Nancy Ábalos, Jorge Larriera (de Los Nocheros uruguayos), Argentino Luna, Martín Alemán y espero no olvidarme de nadie.



Recuerdo una simpática anécdota de Argentino Luna. Recién se quedó viudo, viajó a España junto con una hija y una amiga de ésta, le recomendaron que viniera a Los Cestos un día y le dieron mi teléfono, creo que fue Saravia. El caso es que me llamó diciendo que estaba en la estación de trenes de Segovia y que quería conocerme, le dije que no se moviera de allí y que inmediatamente iba a buscarle. Me lo encontré sentado en una terraza de un bar próximo a la estación, vestido de pampeano con su sombrero típico en él, así entró en Los Cestos con el estupor de los turistas, que allí estaban tomando el aperitivo. Serían las 2 de la tarde, le ofrecí ir a almorzar pero dijo que no tenía hambre y que si yo tenía una guitarra… por supuesto le ofrecí mía, pidió un vino y se puso a cantar hasta las 8 de la tarde, sin descanso, dedicando canciones improvisadas a cualquiera que le saludara o que por allí anduviera. La hija y la amiga ya no sabían a donde ir, que visitar del pueblo, se iban y volvían y él seguía sin descanso. Me dejó literalmente sin vino. Prometió volver, pero nunca más le volví a ver."

Ah se me olvidaba!!! , entre canción y canción, me pidió un rotulador y sin mediar palabra me pintó en la pared un dibujo dedicado, de un ranchito con su tranquera y hasta un árbol. Cuando tuve que pintar el Bar, respeté ese trozo, por supuesto.

"Yo tengo lindos y nostálgicos recuerdos de aquel legendario Boliche, y no sé si me equivoco, pero tal vez que yo haya sido el primero en mencionar a aquel "rincón de amistad" como "boliche", palabra muy argentina que se refería en pasados tiempos a los pequeños negocios de los barrios en donde se vendían las cosas elementales para las necesidades de los hogares; también se denominaban así a los bares humildes, en donde se juntaban los parroquianos a beber sus vinitos o ginebras, y generalmente, en donde siempre aparecía un cantor con su guitarra para animar las reuniones. Luego la palabra degeneró para nombrar así a los sitios de baile para jóvenes...otra cosa...

De todos modos, lo de "boliche", para llamar así al Bar Los Cestos, podría suponerse que es un eufemismo, porque aquel Bar tenía calidad y categoría, era una linda peña, más que un "boliche", de amigos y canto..."

(Roberto Palmer)



Y que mejor que escuchar en youtube la citada zamba, “BOLICHE DE PACO”, en boca de su propio autor, la legendaria primera voz de Los Cantores de Quilla Huasi... Si, ROBERTO PALMER!!!




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